A primera vista un creyente en Dios siempre es alguien que hace interpretaciones teleológicas, pero esto no es necesariamente cierto. Una visión teleológica separa la intención de la acción creadora, pero la visión disteleológica al eliminar la dicotomía entre intención y acción llega ser "monista", esa palabra que un ateo positivista comtiano usa para recalcar la coherencia de su universo mecanicista y que un musulmán llama Unicidad como concepto místico de su cosmovisión teológica estricta. El Islam es mas monista que noumenal en su visión de Dios, casi un panteísmo porque Allah y Realidad son palabras intercambiables para Ibn Arabi. De ahí que el cristianismo como teología blanda opuesta a la teología estricta del Islam, llegue a pensar todos los actos divinos como meditados, existentes algún tiempo en el plano noumenal antes de manifestarse en el plano fenomenal cotidiano. Por tanto el cristiano con su teología blanda separa el pensamiento de Dios o noumen de su efectivización, creando una dimensión noumenal que explica este karma dubitativo o efecto retardado en la justicia divina. Pero este efecto es la presuposición de que Dios hace juicios morales y también que reprime la creación de eventos, lo que colabora a su representación vengativa. La teología blanda es afín con la representación vengativa, debido al concepto de karma dubitativo que debiera llamarse efecto retardado en la Unicidad, esa sensación de que el Día del Juicio es futuro.
Pero la Unicidad debe llegar a ser nihilista, Dios es ateo porque no tiene ningún dios sobre sí mismo. Los ateos son por tanto las personas mas parecidas a Dios, ellos no tienen dios, y al igual que Dios, no reciben de nadie premios ni castigos. Por decirlo de alguna forma, Dios actuará con preferencia a través de los ateos porque estos son los que mas se le parecen, trascendiendo el bien y del mal. Pero la dificultad quizás esté en la expresión "a través de" porque esto también supone la dicotomía hombre-Dios, que no podemos garantizar que exista, por lo que la teología atea será muchas veces una teología agnóstica.
La teología atea además está libre de doxología (alabanzas) pues se interpreta a estas como intentos de soborno y "dorar la perdiz" bajo la quizás falsa premisa de una dicotomía hombre-Dios, y la quizás falsa realidad teleológica en la que se cree vivir. El ateo tiene el sentido de dignidad propia de Dios, no hace plegarias porque estas son como hacer cola con la chusma para recibir limosnas del Estado. También esta teología está libre de la noción de blasfemia, Dios no puede ofenderse, eso sería ponerlo a la altura de la chusma. Prefiero expresarlo así: Que mi corazón sea puro para tratar con una confianza casi blasfema a Dios. Satán es el mas débil de nosotros, no produce miedo, sino risa. Hay que vivir con una actitud temeraria.
Esto es la teología atea, la que se complementará con una teología laica, es decir no unida a la Iglesia Católica o al menos no de forma exclusiva. A partir de este momento hay pendiente una investigación exhaustiva de las conexiones posibles con la Iglesia Ortodoxa Rusa, si canoniza a Darwin y a Freud no creo que tenga problemas con mi teología. Al final, en una intersección de la teología disteleológica (que es una teleología paradójica), la teología laica y la teología atea, nacerá el monstruo escatológico que dará la interpretación correcta de la Biblia. Este monstruo dirá "Haz lo que quieras" como Crowley, pero esta vez con una lógica discursiva sofisticada que es fundamental para el ejercicio de los derechos, llegando a ser una anarquía totalitaria que trastoca todo acuerdo axiológico (valores).
El monstruo escatológico es la intersección de todas las paradojas dando por resultado los siguientes puntos generales en la interpretación de la Biblia:
* Hay una correspondencia entre la historiografía bíblica y la historia oficial. Esto ya lo señalé en capítulos previos y es la base para la Cliodinámica Cuántica pues la duración de los escenarios históricos como patrones proféticos quizás permitirán establecer científicamente su reaparición (iteración) en la arquitectura del tiempo. Detrás de esas iteraciones esta el campo morfogenético de la historia, y talvez es lo mismo que fue mal interpretado como "el milenio inventado" y las "dinastías clonadas" en el revisionismo extremo de Anatoli Fomenko. Aunque no lo descarto, aun así los patrones iterados ya no serán numerología bíblica si no un fenómeno cliodinámico verificable.
* Para que esta historiografía bíblica tenga sentido para la historia oficial, todos los patriarcas de la Biblia deben ser seres colectivos. Pedro, Jesús, David, Salomón, Moisés, Daniel, Jacob, Essau, Ismael, Isaac, Abraham, Sem, Cam, Jafet, Noé, Caín, Set, Abel, Adán, ninguno es una persona, si no la personalidad de un pueblo. Comenzando desde Adán, como la humanidad adánica, también llamada homo sapiens sapiens, dos veces sapiens pues tiene el qalam (escritura). Luego sus hijos Caín, Abel, y Set como las primeras tribus vegetarianas, carnívoras y omnívoras respectivamente. Los puramente carnívoros (abelitas) fueron eliminados por los vegetarianos (cainitas). Por eso la humanidad desciende de cainitas, los mas agresivos, y setitas (omnívoros) los menos agresivos. Lo mismo sucederá luego en la elección entre Ismael e Isaac, y después entre Essau y Jacob, dos relatos donde Dios prefiere al menos enérgico y menos patriarcal de dos hermanos. La misma lógica para interpretar la extinción de los nephilim por medio de un diluvio: se está disminuyendo la virilidad, el poder físico de la humanidad. A esto le llamaré Teoría del Patriarca Colectivo. Siguiendo a los patriarcas colectivos se advertirá como la Biblia promueve la disgenesia de la humanidad, sentido en el que la Biblia es también un libro satánico.
* Como ser colectivo tiene sentido que Matusalén haya vivido novecientos años, aunque esto también puede explicarse convirtiendo los años en meses. Así también tiene mas sentido que los israelitas hayan viajado cuarenta años en el desierto: no eran tan idiotas, en realidad fueron cuarenta semanas o cuarenta días. Hay aparte un sentido de tiempo fractal, unas veces la misma unidad puede significar días, otras veces semanas, años, pero esto se verá limitado por la cronología histórica.
* El mundo (animales, plantas y personas) habría evolucionado por la acción divina que se efectiviza al instante llegando a ser una evolución creadora. Otras intervenciones inteligentes en el pasado como terraformación e ingeniería genética también pudieron llegar a suceder, pero las criaturas que las llevaron a cabo evolucionaron en sentido darwiniano desde formas de vida animal. La selección natural no sería otra cosa que el carácter masculino y disciplinador de Dios, su robustez psicológica, el Dios eugenista. El Espíritu Santo definido como "fuerza activa de Dios" es el Día del Juicio actualizado a cada instante, la perpetua yihad de la naturaleza y como dice Blabatsky, es sinónimo de Lucifer. Por este carácter presente en toda la obra, la Biblia siempre será acusada de analfabetismo emocional y brutalidad. Y la eterna denuncia del izquierdista a los sacerdotes católicos pedófilos se nutre del sentido en que Dios es pedófilo, no sólo porque María tenía entre 12 y 15 años cuando la visitó el Espíritu Santo, sino porque cualquier otra mujer que hubiera elegido estaría ante Dios en la misma desigualdad de poder de un adulto a una niña. En este sentido la Gnosis Hiperbórea con su lucha contra el Demiurgo Jehová, es en el fondo "de izquierdas" aunque ellos se autodenominan nacional socialistas.
* De considerar a Lucifer como el primer patriarca colectivo, por pertenecer mas al plano mítico que histórico, su rebelión y su caída corresponderían a la prehistoria, a la rebelión contra los amos anunakis, la formación de la primera molécula autoreplicante (ARN, ADN) o la primera célula. Si la caída de Lucifer se itera en la formación de cualquier nivel de complejidad, entonces Lucifer es la fuerza que impulsa la evolución. Su caída aparece tanto en el esfuerzo de una ameba proteus por crear un seudópodo para devorar una célula, pasando por el brazo de Eva estirándose para tomar la manzana del pecado, hasta el dedo de Tomás en la llaga de Jesús. Por eso el mito de la creación de los sumerios es el complemento ideal para la Biblia, pues da una perspectiva diferente de Lucifer como dios libertador y lo llama Enki, opuesto de Jehová el esclavizador al que llama Enlil.
* La palabra revelación debe sustituirse por la palabra transcognición. Algunos textos de la Biblia son transcogniciones combinados con simple trabajo de historiador. El trabajo del historiador también está sobrestimado muchas veces, es el de un compilador. Para ser un historiador hay que ser un poco crédulo. Hay que darle una oportunidad a la Biblia al menos como adivinación histórica. Creemos en la intuición del historiador, o al menos en el sentido estético de su adivinación, no sabemos nada, vagamos en un pirronismo histórico, espacial y genético. En la compilación de los textos bíblicos también puede haber una transcognición, mas una simple historiografía basada en inferencias racionales. La Biblia es por tanto la transcognición del Deus Ex Machina de la historia complementaria con todos los otros libros religiosos, y con la Cliodinámica Cuántica, la Teoría del Topocosmos, y la Teoría de la Tierra Bonsái. Todo esto debería formar un weltanschauung, canon de conocimiento, paradigma, mitología y mentira lógica estable en el tiempo.
* El mundo (animales, plantas y personas) habría evolucionado por la acción divina que se efectiviza al instante llegando a ser una evolución creadora. Otras intervenciones inteligentes en el pasado como terraformación e ingeniería genética también pudieron llegar a suceder, pero las criaturas que las llevaron a cabo evolucionaron en sentido darwiniano desde formas de vida animal. La selección natural no sería otra cosa que el carácter masculino y disciplinador de Dios, su robustez psicológica, el Dios eugenista. El Espíritu Santo definido como "fuerza activa de Dios" es el Día del Juicio actualizado a cada instante, la perpetua yihad de la naturaleza y como dice Blabatsky, es sinónimo de Lucifer. Por este carácter presente en toda la obra, la Biblia siempre será acusada de analfabetismo emocional y brutalidad. Y la eterna denuncia del izquierdista a los sacerdotes católicos pedófilos se nutre del sentido en que Dios es pedófilo, no sólo porque María tenía entre 12 y 15 años cuando la visitó el Espíritu Santo, sino porque cualquier otra mujer que hubiera elegido estaría ante Dios en la misma desigualdad de poder de un adulto a una niña. En este sentido la Gnosis Hiperbórea con su lucha contra el Demiurgo Jehová, es en el fondo "de izquierdas" aunque ellos se autodenominan nacional socialistas.
* De considerar a Lucifer como el primer patriarca colectivo, por pertenecer mas al plano mítico que histórico, su rebelión y su caída corresponderían a la prehistoria, a la rebelión contra los amos anunakis, la formación de la primera molécula autoreplicante (ARN, ADN) o la primera célula. Si la caída de Lucifer se itera en la formación de cualquier nivel de complejidad, entonces Lucifer es la fuerza que impulsa la evolución. Su caída aparece tanto en el esfuerzo de una ameba proteus por crear un seudópodo para devorar una célula, pasando por el brazo de Eva estirándose para tomar la manzana del pecado, hasta el dedo de Tomás en la llaga de Jesús. Por eso el mito de la creación de los sumerios es el complemento ideal para la Biblia, pues da una perspectiva diferente de Lucifer como dios libertador y lo llama Enki, opuesto de Jehová el esclavizador al que llama Enlil.
* La palabra revelación debe sustituirse por la palabra transcognición. Algunos textos de la Biblia son transcogniciones combinados con simple trabajo de historiador. El trabajo del historiador también está sobrestimado muchas veces, es el de un compilador. Para ser un historiador hay que ser un poco crédulo. Hay que darle una oportunidad a la Biblia al menos como adivinación histórica. Creemos en la intuición del historiador, o al menos en el sentido estético de su adivinación, no sabemos nada, vagamos en un pirronismo histórico, espacial y genético. En la compilación de los textos bíblicos también puede haber una transcognición, mas una simple historiografía basada en inferencias racionales. La Biblia es por tanto la transcognición del Deus Ex Machina de la historia complementaria con todos los otros libros religiosos, y con la Cliodinámica Cuántica, la Teoría del Topocosmos, y la Teoría de la Tierra Bonsái. Todo esto debería formar un weltanschauung, canon de conocimiento, paradigma, mitología y mentira lógica estable en el tiempo.